Qué es el aceite de krill

El krill se considera omnívoro, pero se alimenta principalmente de fitoplancton. Precisamente por esto, constituye un elemento fundamental en la cadena trófica puesto que es el alimento de otras especies que no pueden alimentarse directamente de plancton. El krill constituye la base de la dieta de muchos animales como las ballenas, las focas o los calamares. Junto al plancton, el krill constituye la mayor biomasa del planeta, aunque su futuro peligra por el calentamiento global.

El aceite de krill es un producto que tiene varios beneficios nutricionales. Es positivo incluirlo en la pauta de manera frecuente para sacarle el máximo partido y conseguir así mejorar el estado de salud. Se trata de un producto natural que se puede conseguir cada vez en más supermercados diferentes, la mayor parte de las veces en forma de suplemento dietético.

Antes de comenzar es importante destacar que el consumo de grasas dietéticas puede marcar la diferencia en lo que a funcionamiento del organismo se refiere. Es clave mantener una ingesta suficiente de ácidos grasos de calidad, es decir, de tipo cis. Estos consiguen mantener controlada la inflamación en el medio interno, logrando así evitar el desarrollo de patologías crónicas y complejas.

Beneficios del aceite de krill

Es fundamental explicar que el aceite de krill tiene una procedencia de un animal marino parecido a un camarón. Constituye una fuente de compuestos antioxidantes. Estos elementos neutralizan la formación de los radicales libres y su posterior acumulación en los tejidos del organismo. Dicho efecto se relaciona con una menor incidencia de las enfermedades complejas.

Este nutriente marino, es un producto que concentra en su interior ácidos grasos de la serie omega 3. Estos lípidos son muy importantes para la salud humana. Poseen propiedades antiinflamatorias y consiguen mejorar el funcionamiento del sistema cardiovascular.

Además, estas grasas resultan especialmente positivas para los deportistas. Por una parte reducen el catabolismo muscular en situaciones de dieta hipocalórica. También, tienen la capacidad de estimular los procesos de recuperación y de ayudar a modular el dolor tras sesiones de trabajo muy intensas. Su ingesta ayuda a prevenir el desarrollo de problemas de tipo funcional, como es el caso de la artritis.

¿Cómo consumir el aceite de krill?

El saludable aceite de krill se puede encontrar principalmente en tiendas de suplementos dietéticos. También en las secciones de los supermercados destinadas a esta clase de productos. Lo primero es elegir un aceite de calidad, para ello habrá que fijarse en la certificación. Acto seguido, se puede incluir en la pauta, aunque se recomienda que la toma no supere un periodo máximo de 3 meses sin descanso.

Normalmente se consumen entre 1 y 3 cápsulas al día de aceite de krill con una de las comidas principales. De hecho, se recomienda priorizar este producto frente a otros con alto contenido en omega 3, como el aceite de pescado. El EPA y el DHA cuentan con una mayor disponibilidad en el primero, por lo que los beneficios serán superiores.

Aceite de krill, un producto con beneficios nutricionales

Según has podido comprobar, el aceite de krill es un producto que cuenta con varios beneficios nutricionales, por lo que se considera positivo para la salud. Cada vez es más frecuente que las personas lo incorporen en su dieta con el objetivo de aumentar la presencia de los omega 3 en la pauta.

• El aceite de krill, a diferencia del aceite de pescado, contiene astaxantina natural, un potente antioxidante que protege a las grasas de su oxidación. El aceite de krill es 200 veces más resistente al daño oxidativo que el aceite de pescado.
• Mejora el metabolismo cerebral de la glucosa.
• Promueve el metabolismo de los lípidos.
• Ayuda a regular la cadena respiratoria mitocondrial.
• Reduce la síntesis de colesterol.
• El aceite de krill activa la señalización mTOR. La suplementación con aceite de krill en atletas es segura, y su efecto sobre el ejercicio de resistencia merece una investigación más a fondo.
• Gracias al contenido en antioxidante astaxantina el aceite de krill es un excelente aliado para proteger la piel de los rayos ultravioletas y combate el envejecimiento de la piel.

Por último, hay que destacar que la mayor parte de los efectos secundarios del aceite de krill se refieren a problemas gastrointestinales similares a los vistos en los aceites de pescado como acidez, reflujo de pescado, hinchazón abdominal o diarrea.

Necesitan tomar especiales precauciones:

• Mujeres embarazadas y lactantes
• Personas con alteraciones de la coagulación
• Diabéticos
• Personas obesas
• Alérgicos al pescado
• Pacientes quirúrgicos

Hasta que existan más estudios sobre los efectos del aceite de krill en el organismo, estos grupos de personas deberían evitar la suplementación con aceite de krill.